SUA

Me llamo Sua, significa “el fuego”. Soy una persona aparentemente normal, agradable, amable… podría ser tu compañera de trabajo o ir a tu lado en el metro.

 

Hasta aquí poca diferencia con cualquier otro ser humano salvo por dos pequeños detalles… soy una vampira de casi mil años que aparenta físicamente unos 22 o 23 años.

 

Adoro el siglo XXI porque la gente ya no cree en las leyendas, la imaginación ha dado paso a la avaricia, la superficialidad.... la ambición. Se han desterrado los valores realmente importantes, todo esto me convierte en un depredador libre, sin apenas enemigos, con un gran poder, experiencia y sabiduría otorgados por los años vividos.

 

Puedo llevar una existencia bastante agradable salvo algún pequeño desastre superable gracias a mi astucia, esto me gusta.

 

Nunca duermo, solo descanso mi cuerpo unas 4 o 5 horas semanales. No me afectan las cruces, ni el ajo, ni el agua bendita, el sol me resulta algo molesto pero puedo caminar de día tan solo me encuentro más ágil por la noche al ser mi momento más agradable pero no supone un gran problema para mi y nunca daño a seres inocentes. De hecho, actualmente no suelo matar salvo en casos extremos y solo quito algunos años de vida o descargo de energía a la persona durante una temporada porque además de ser un vampiro de sangre también lo soy energético.

 

Tan solo intento mantener un equilibrio…..

 

Las personas excesivamente codiciosas, egoístas o dañinas son mi especialidad y me limito a cazarlas sin ningún cargo de conciencia incluso me considero una gran ayuda para muchos de los seres inocentes victimas de sus actos.

 

Es viernes por la noche y me encuentro en un local gótico, curioso club en dónde todos quieren imitar a las criaturas de la noche eso me ayuda a pasar desapercibida. Todo el mundo piensa que el brillo extraño de mis ojos o sus cambios de tonalidades son por las lentillas adquiridas en cualquier tienda gótica de la zona para imitar a mi “monstruo” favorito.

 

Me siento en un rincón a contemplar como van entrando los jóvenes con sus imitaciones de ropas antiguas, sus caritas inocentes maquilladas de un blanco impoluto, labios pintados de negro, casacas, vestidos victorianos y otras indumentarias basadas en actores de películas de terror o músicos de rock.

 

Pero al poco rato puedo distinguir ese horrible olor de persona destinada a hacer daño y ahora es muy fuerte.. un posible depredador humano esta cercano a mi círculo vital.

 

Es un hombre corpulento con la cabeza rapada y un extraño tatuaje en su mejilla izquierda. Sus ojos no dejan ni un segundo de mirar a una chica rubia, menuda, de rostro angelical y pelo muy largo.

Puedo leer su mente, ver como intentara acorralarla, violarla y matarla sin pensárselo dos veces. Es un hombre resentido, frustrado y amargado a pesar de no tener más de 28 años. La maldad la lleva impresa en un alma oscura construida tras años de existencia sin valores.

 

Va hacia la chica intentando acorralarla en uno de los reservados pero yo rápidamente me interpongo entre él y la chica. Le digo a la chica que la están buscando sus amigas, ella me cree y sale del reservado.

 

Sola con aquel hombre, sin testigo alguno en aquel reservado…. no dude.

 

Al día siguiente la chica solo recordaba haber estado pasando una agradable noche con sus amigas, del hombre no quedaba ni rastro y yo seguí como siempre… manteniendo el equilibrio.